\()/ 22.45 HS En Mar Del Plata \()/

Impecable.
Sali de la oficina y cuando llegue a la parada del 106, alli vi venir al colectivo. Sin correr sin verlo pasar, simplemente fue una excelente coordinacion.
Llegue a Retiro con poco mas de media hora de anticipacion. Compre dos botellitas de agua e hice tiempo ajusticiando la primera de ellas mientras la otra dormia en mi mochila.
Me quede a un costadito del movimiento, miraba las caras de la gente. La alegria de quienes llegaban y veian de nuevo a sus seres queridos, que los esperaban despues de algun tiempo.
Besos sonoros, caritas tristes, caritas alegres, abrazos, recomendaciones, chistes...
Yo estaba fuera de todo eso.
Del otro lado del vidrio llego mi micro -, deje que la gente se apiñe -tonta conducta !, si todos tienen su lugar ya asignado-, y cuando el tumulto disminuyo subi y me ubique en mi asiento.
Salio en horario -22.30 hs asignado, 22.35 practico-.
Me habia preparado un CD con los temas mas calmos que tienen Los Piojos -de ellos se trata este viaje-, y disfrute de la vista nocturna de una ciudad que conozco mas que nada de dia. La vista oscura del Rio De La Plata y la tranquilidad el movimiento.
Apenas pase la altura de Quilmes me dormi.

Me desperte ocacionalmente, algun giro en el asiento, alguna parada de peaje.
Cuando me volvi a despertar el reloj de la terminal de micros de Mar Del Plata me decia que eran las 3.45 hs, lo cual me decia que el arribo fue 15 minutos antes de lo previsto. Sin esforzarme mucho busque habitacion en los hoteles que rodean la terminal.
Obvio, no encontre nada !.
Y segui con el plan original que tenia en mente desde que compre mis pasajes de micro.
Amanecer en la playa, dormir en la playa o donde se pueda.
Antes de irme al mar, pase por la Plaza Del Agua, que aunque apagada se ve muy linda.
Asi que, despues de ese paseo si me dirigi al mar. Baje por Guemes y fui acompañado por el vuelo de los murcielagos que se dedicaban a alimentarse.

Ver el mar siempre me da una gran alegria. Es como una conexion, es como un momento de decir, llegue, una vez mas, aunque sea por poco tiempo, pero un año mas, una vez mas, volvi al mar.

Toque el agua -un Rito personal a las 4.48-, pense que encontraria una playa desierta, pero imposible... Ademas de algunas almas Piojosas que dormitaban en algun lugar de la rambla, chicos que estaban de regreso de alguna movida... Como dicen en El Balneario De Los Doctores Crotos, la playa roñoza al amanecer fue mia.
Senti el sabor salado del aire, la fuerza del viento y me quede disfrutando del ruido de las olas rompiendo en la playa. Me quede un largo rato parado ahi, solo, viendo y escuchando.
En un momento senti la soledad... No fue bronca, fue un poco de amargura... Pero no deje que ese pensamiento me gane, y aprovechando que la marea subia y algunas olas me mojaban ya las zapatillas me fui corriendo un poco. Apenas se veia una lonja de luna sobre la ciudad y un poco mas abajo la luz del sol anunciaba el amanecer.
Camine hasta un pequeño muelle de hormigon, me pare bien en la punta nuevamente mirando y escuchando las olas. De vez en cuando el mar me escupia suavemente. Otras no tanto. Feliz me senti de verme bañado por las olas.
Me sente a un costado, tenia a una cuadra el Torreon Del Monje y el sol ya se anunciaba.

Siempre es hermoso ver el amanecer, tambien hay una gran cantidad de energia.
Tambien siempre me sorprende como el momento del amanecer es tan rapido, uno apenas ve el sol asomandose, y de manera casi inmediata, el sol ya esta pleno.

Me cruce con un perro macanudo, camine un poco y como no queria estar en la playa me pregunte... Donde iria ???... Me acorde de Sierra De Los Padres, y despues de comprar el diario me dedique a buscar la manera de llegar a las sierras. Dos horas despues, espera de una hora de por medio y un dilatado viaje en colectivo mas un paseito en remis, estaba en la parte mas alta de la sierra. Llegue faltando un cuarto de hora para las nueve de la mañana, estaba todo cerrado, era el primer turista del dia :), sin emabargo no hubo banda de recepcion ni una botella minima de agua -ya el calor se sentia y me moria de sed-. Pero sali a ver que onda, y me quede maravillado con la vista. Todo se ve distinto desde las alturas. Mucho, mucho verde para ver, las quintas, los campos, todo es de una belleza muy hermosa. El canto de los pajaros era tan lindo como la vista. Me sente en un banco y solo me dedique a mirar. Deseaba compañia, deseaba tener alguien a mi lado para compartir ese momento. Pense un rato en las personas que ya no estan, en mis deseos que hicieron agua en algun momento y estube a punto de ponerme a escribir, pero por primera vez en mucho, mucho tiempo me dije que no era bueno hacerlo. Que si la vida me dio esa mañana para mi solo, por algo seria, y que en todo caso, lo mejor seria disfrutarla.
Y eso fue lo que hice.

Mire todo, cada punto de verde, cada arbol. Me deleite con las golondrinas, los gorriones que venian a buscar algunas galletitas que les tiraba, los aguiluchos -alconcitos ???-, todo animal que volaba fue como si yo volara un poco. Alla a lo lejos habia vacas, alguna nube. Me tire a disfrutar del canto de los pajaros, a sentir el viento debajo de una higuera que me daba la sombra fresca que tan bien me hacia sentir.
Despues de un tiempo el sueño me vencio. Ya hacia mas de cinco horas que estaba despierto despues de haber dormido poco tiempo en el micro, asi que me dormi, feliz.
Me desperte varias horas despues, sali a caminar un poco, a ver Mardel desde lejos, desde lo alto, desde otro lado, charle un poco con algunas personas -una vieja que no paraba de hablar, una pareja de viejitos de Canada que estaban avistando aves y sabian tanto español como yo se aleman y una parejita Piojosa perdida que buscaba La Gruta De Los Pañuelos- y tome una sabroza cerveza Quilmes Black en la soledad de las calles serranas. Una belleza, lejos de la gente agolpada de las playas, una tranquilidad magnifica.
Despues de la recorrida me fui a buscar el colectivo de regreso a la ciudad. Pase de largo por la atestada playa y me fui a buscar un cafe con leche grandote y unos tostados. Camine un poco por la peatonaly me fui para la avenida Independecia a buscar un colectivo que me deje en el Estadio Mundialista.
Ya eramos mayoria los que estabamos con nuestra remera Piojosa puesta. Los colectivos llenos, algunos ya con la gente cantando.
Como no tenia ganas de ir colgado busque un taxi pero de repente aparecio un remis. Un grande el remisero, porque me dijo que tenia que ir justo para el lado del estadio y me llevo gratis, un idolo con un geste que hace mil años no veia. No solo no me cobro, sino que hasta me regreso la propina. Un gesto excelente.
Pase por el control policial sin problemas, entre en el Patinodromo, me cruce con algunos Piojosos conocidos y me fui a buscar la remera de siempre.
El Ritual siempre es grosso. Despues del tiempo de espera se largo con todo faltando 20 minutos para las 23 hs.
Los temas que no faltaron y queria escuchar estubieron -Luz De Marfil, Todo Pasa, Agua, Buenos Dias Palomar, Muevelo-, y un monton mas que hacen que la fiesta siempre sea un placer.
Cuando estaba cantado Muevelo -que ya es el final-, me puse a pensar que vale la pena, sin dudas, el movimiento, aguantarse un dia si bañarse, caminar, hacer tiempo, porque obvio que uno disfruta de la feliz, pero todo mi viaje fue para esas casi dos horas de cantar, gritar, saltar y bailar. Ese es El Ritual, eso es tener Miles De Almas felices...

Lamentablemente apenas empezo Finale, yo ya empezaba a irme del patinodromo. Era poco mas de la una de la mañana y a las 2.30 salia mi micro. Me camine las mas o menos 40 cuadras hasta la estacion, llegue justo cuando faltaba media hora para la salida.
Me fui al baño, me refresque lo mas y mejor que pude, me cambie la remera, busque mi provision de agua y me fui a buscar el micro, que salio a horario, asi que 22.45 despues de haber llegado a La Feliz ya estaba regresando a capital.
Fue casi instantaneo, el micro no habia salido a la ruta que yo ya estaba dormido.
Me desperte como siempre de manera ocacional, la ruta oscura, el cielo despejado, sin luna y de nuevo el sueño. Y asi paso el viaje, me desperte cuando el micro pasaba el ultimo peaje de la autopista Bs. As. / La Plata, en Dock Sud.
Impecable.
El micro llego a las 8 en punto a Retiro. Me baje, me subi al 132, me baje en Once, me subi al tren, me baje en Ituzaingo y camine desde la estacion a casa. En una hora y media llegue a casa desde Retiro, tiempo record si se considera que el viaje lo hice en transporte publico.
Me tome un cafe reparador y me fui a bañar.

Sacando algunos momentos de duda, o de carencia, este ha sido un dia excelente para mi.
Quiza un poco solitario en algunos momentos, pero me vino muy bien para pensar un poco mas en mi, y en los pasos que a futuro dare.
Pero todo eso quedara para otro momento.

404 km de ida.
22.45 Hs en la feliz.
1 Ritual
404 km de regreso.

Quiza, esto deba ser estar feliz.

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Escuchando a Los Piojos - Buenos Dias Palomar - En Vivo Estadio Boca.